En el orocué viví experiencias que no olvidaré, hicimos un tejido con hojas de palma, el cual resulto ser muy resistente, a pesar de que tuvimos muchas dificultades y al final nos toco aprender experimentando nosotros mismos con el material. También pasamos 2 días montados en una falca observando y analizando el rio meta y su comportamiento, las playas que dejaba a su paso y como el viento formaba signos de viento que se mecía sobre las playas. Además visitamos una finca llamada Los Sabanales, esta tenia un contraste muy relevante de tierra árida y seca con tierra húmeda y esponjosa (humedales), esto nos permitio ver diferentes tipos de animales desde aves hermosas coloridas y sonoras, hasta babillas rodeadas de buchones que crecen sobre aguas en reposo y absorben el oxigeno del agua creando luego un problema para la vitalidad del ecosistema. en estas 1200 hectareas que acaparaba esta espaciosa finca tambien se encontraba un gran numero de reces, ademas de caballos y otros animales e insectos que no se podian observar a simple vista.
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